ME CONOZCO Y ME QUIERO

El proyecto “ME CONOZCO Y ME QUIERO”, es válido como propuesta de desarrollo curricular para el nivel de preescolar, puesto que implementa estrategias metodológicas que parten de las necesidades, intereses y concepciones que tiene el niño de si mismo, permitiendo al infante, indagar y explorar su propio cuerpo desde la lógica de sus emociones, sensaciones, la exploración física y la imaginación creadora e ir comunicando sus percepciones, vivencias y experiencias a través de él, convirtiéndolo, en contexto vivo del aprendizaje significativo.

El taller como estrategia metodológica, posee una serie de actividades que van muy ligadas a la vida misma del niño(a), exigiendo a sus participantes asumir posiciones, responsabilidades y compromisos que esto le implica .A través del taller, se hace un reconocimiento del cuerpo, fortaleciendo en el niño(a) la autoestima, y la construcción de vínculos socio afectivo con sus compañeros; propicia un espacio de comunicación y participación, donde el niño exterioriza las percepciones que tiene de si mismo y de su entorno social, fortaleciendo el trabajo grupal o colectivo, generando procesos de enseñanza- aprendizaje. En él, el conocimiento se va construyendo conjuntamente, basándose en los quehaceres y saberes cotidianos de los asistentes, a pesar de que el trabajo en un taller es conjunto, este abre unos espacios para que la persona como tal se exprese y pueda expresar sus sentimientos, desacuerdos y emociones.
El juego, es un eje dinamizador de la vida del educando, mediante el cual construye conocimientos, se encuentra consigo mismo, con el mundo físico y social, comparte sus intereses, desarrolla habilidades de comunicación, permitiendo la construcción y apropiación de normas para la convivencia

ETAPA DE DESARROLLO

talleres.

ORIGEN DE LOS NOMBRES
Para el origen de los nombres pudimos involucrar a los padres de familia, ellos nos contaron a través de una nota que les dejamos en el cuaderno sobre los orígenes de los nombres de sus hijos, tuvimos muchísimo apoyo, ya que todos participaron de la actividad trayendo la información que sería socializada por cada niño en el salón.
Con la información recogida, nos dividimos por colectivos para organizar como íbamos a socializarla. A todos los niños les gustó la metodología, de socializarlo a través de un conversatorio con sus compañeros.
Todos los niños querían participar de la actividad y se expresaron muy bien en los relatos que contaban. Pudimos notar que les gusta mucho su nombre y que los padres buscaban ponerles los nombres de sus abuelos o los de ellos mismos.

En esta actividad, se pudo observar que los niños (as) son tímidos pero se motivan al mirar su cuerpo. Algunos con elogios y otros con un rechazo hacen la descripción de todo su cuerpo, se perciben gordos, altos, flacos, feos, bonitos, de ojos grandes y de diferentes colores, con pelitos arriba de sus ojos, su cara redonda como una pelota. Se creen diferentes ante sus compañeros, tienen distintas formas de peinarse y vestirse, con un cuerpo grande y de piernas y brazos largos. Los niños(as) son muy egocéntricos, se perciben muy bonitos, altos, tienen una actitud positiva hacia su propio cuerpo, reconocen su género, en los hombres se nota mucho el machismo, en las niñas persiste la vanidad y la competencia hacia el mismo género, es decir quieren ser las más bonitas y sentirse importantes por los niños, les gusta que las miren, que les vean las piernas.

TALLER DE LOS MASAJES

Se realizó el taller de los masajes ambientando el aula de clases con velas aromáticas, música relajante. En la primera sesión realizamos aeróbicos, ejercicios de estiramiento, luego en parejas iban haciendo los masajes que se explicaron. Con esta actividad se logró que los niños expresaran sus emociones y sensaciones.

Estos son algunos de las opiniones de los niños:
-Andrés Felipe:”a mí me gustan mucho los masajes porque me relajan”
-Angie Meliza:”el aparato que trajo la profe Johana es muy chévere y me hace muchas Cosquillitas”

Durante el desarrollo del taller de los masajes, se observó que algunos niños y niñas, son muy sensibles sintiendo agrado y otros disgusto o desconfianza al ser masajeados por otras personas en diferentes partes de su cuerpo, lo que lleva a inferir que en el contexto familiar las distintas maneras de mirar el cuerpo y las concepciones que se tienen frente a su cuidado marcan limitaciones que llevan al niño a inhibirse y mostrarse renuente cuando se trata de explorar su cuerpo. Algunos niños(as) reconocen sus partes más sensibles, sienten gusto, cosquilleo en sus pies, cuello y espalda, en su cara denotan alegría, tristeza, ternura sobre todo cuando manifiestan las experiencias que han vivido con su familia; Tales como cuando comparten con sus familias masajes, que ayudan al niño y fortalece la capacidad de explorar su cuerpo. La mayoría de los niños(as) han sido estimulados, consentidos, sus padres los quieren, hacen que ellos se respeten y cuiden su cuerpo, sintiendo seguridad de sí mismo, algunos expresan que sus padres no le han hecho masajes por razones laborales o por ausencia de ellos, ya que viven con parientes cercanos.

El taller del modelado del cuerpo en lana se desarrolló dentro del aula. A cada niño se le dio una fotocopia del dibujo de un niño con sus órganos genitales y la niña de igual forma.
El objetivo de la actividad es lograr que los niños identifiquen la diferencia que hay entre el niño y la niña y desarrollar la motricidad fina con el delineado en lana de la figura de cada cuerpo. En el transcurso de esta se noto que habían niños que ya tenían conocimiento de lo que los diferenciaba y lo expresaban de manera natural.

TALLER DE LOS SENTIDOS

Se organizó el salón con las mesas en círculo, ubicando sobre éstas los instrumentos musicales. Posteriormente salieron los niños al patio, se les colocó una venda que tapaba los ojos para que no pudieran observar lo que había dentro del salón. La actividad consistía en que los niños y niñas identificaban los instrumentos y los sonidos provenientes de éstos a través de los sentidos del tacto y el oído.
Una vez organizados, los niños con los ojos vendados, se dirigieron al salón en un trencito, al llegar se ubicaron en el suelo, se explicó la actividad a realizar y se procedió a pasar cada uno por las mesas. Ellos tocaron, palparon e hicieron sonar los instrumentos para poderlos identificar por la forma y el sonido.

Esta actividad se convirtió en el vehículo de recuerdo de aquellos aspectos y situaciones más atemorizadoras de sus vidas, en el sentido que cada una de éstas los ha marcado y han influido en la construcción de su personalidad y actitudes frente a las personas que los rodean. Así pues, en su mayoría expresaron temor, pavor y rechazo leyendas populares como la bruja, el diablo, el coco, los monstruos, los fantasmas y otros personajes que hacen parte de su imaginación o que han sido infundidos por los padres y demás personas buscando atemorizarlos para que obedezcan órdenes o realicen determinadas actividades que ellos les piden. En otros casos han sido influenciados por la Tv, radio y otros consumos culturales de los niños como revistas, historietas, e imágenes. .Los niños plasmaron en un cuarto de cartulina todo lo que les causaba miedo, retomando lo que dijeron en el conversatorio cuando se narro el cuento

SOCIALIZACION

Para mostrar el proceso vivido durante esta investigación se realizaron canciones, poemas, dos puestas en escena y el desarrollo del taller en modelado en masa de pan que se realizó con los padres y los niños y niñas del Jardín Infantil Picardías toda esta muestra se fue construyendo semana tras semana, pero que para poder construir la guía final se partió de la recuperación del proceso con los niños y niñas de preescolar.

Así desde la generalidad todos coincidieron en señalar como primera etapa: la negociación en donde se definió el nombre del proyecto de preescolar A y preescolar B, logrado por medio de un conversatorio con los niños/as y con la ayuda de los padres de familia, quienes luego eligieron democráticamente el nombre más pertinente con la investigación a realizar; cada grado se encargo de dar a conocer el nombre su proyecto.
En la segunda etapa: el desarrollo, se abarcó una pegunta general: ¿Cómo le niño reconoce su cuerpo y fortalece su autoestima? , allí se trabajo el rincón de los nombres, en donde cada niño plasmo su nombre en una tira de cartulina y lo decoro según su ingenio y creatividad, logrando que los niños se sintieran reconocidos, con el fin de conocerse unos a otros, saliendo del anonimato; también se hicieron talleres de auto reconocimiento: el taller de los espejos, de los masajes, el taller del modelado en plastilina, en lana y en tiza, el taller de los miedos, y en conjunto con los papitos el día de la socialización se realizó el taller de modelado en masa de pan que dieron cuenta de las experiencias vividas.
Fue la memoria del proceso la que permitió la selección y preparación de lo que se presentaría a la comunidad, que se plasmó en el guión que a continuación se presenta.